LIVERMORE, California - 14 de junio de 2022 - Bienvenidos a la era del tractor autónomo. En un reportaje reciente, el San Francisco Chronicle cubrió Monarch Tractor y lo que la autonomía agrícola significará para el trabajo, la productividad y la seguridad en la granja.
Se trata de una tecnología que parece ir por delante del cacareado turismo autónomo. Notoriamente, la antigua previsión de la industria automovilística de que habría 10 millones de turismos autoconducidos en la carretera en 2020 no se cumplió. Pero mientras las berlinas Waymo y Cruise siguen recorriendo experimentalmente las calles de San Francisco, una empresa de Livermore llamada Monarch pretende desplegar flotas de sus tractores eléctricos con conductor opcional en viñedos y granjas a finales de este año.
"La Oficina Agrícola de California apoya la formación de un comité consultivo, dijo su director de política de empleo, Brian Little. Cree que está claro que los vehículos autónomos formarán parte del futuro, y es hora de averiguar cómo encajarán en la industria agrícola."
El Monarch puede hacer muchas cosas, según Penmetsa, que lleva trabajando en el sector de los vehículos eléctricos desde principios de la década de 2000. Sus baterías eléctricas reducirán la dependencia de los agricultores del combustible, disminuirán las emisiones e incluso les permitirán vender energía a la red. Sus funciones inteligentes pueden permitir a los agricultores detectar a tiempo problemas en sus cultivos, identificar el estrés hídrico, aplicar pulverizaciones con mayor precisión y ofrecer otras ventajas.
"Realmente creemos que la autonomía es el camino del futuro en la agricultura", dijo Niki Wente, directora de operaciones de viñedos en Wente Vineyards de Livermore, que ha estado probando tractores Monarch desde 2019 (pero hasta ahora ha mantenido conductores a bordo). "Creo que es potencialmente una revolución"
El atractivo de un tractor autónomo para quienes poseen granjas es claro. En medio de una escasez a largo plazo de mano de obra agrícola, los agricultores podrían utilizar su fuerza de trabajo de manera más eficiente. En lugar de tener un conductor en cada tractor, un solo empleado podría supervisar varios tractores a distancia.
Uno de los cuatro cofundadores de Monarch tiene profundas conexiones con la industria vinícola: Carlo Mondavi, nieto del difunto Robert Mondavi, el viticultor más conocido del Valle de Napa. Mondavi unió fuerzas con Penmetsa y los cofundadores Zachary Omohundro y Mark Schwager tras años de intentar, con escaso éxito, que la industria vinícola fuera más ecológica. Mondavi estaba convencido de que había que eliminar los pesticidas sintéticos y reducir las emisiones de carbono, por lo que puso en marcha una campaña llamada "El desafío de la monarca", que consistía en vender un vino rosado para recaudar fondos para una organización de protección de las mariposas.